Estilo nórdico-escandinavo

Este es un estilo decorativo muy de moda en la actualidad, debido a que su aire minimalista, su tendencia a los colores claros y sus reminiscencias folk encajan muy bien con las necesidades y gustos contemporáneos.

Origen

Como su propio nombre indica, este estilo surgió en los Países nórdicos, tales como Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca. Su origen se data a principios del siglo XX, llegando a alcanzar mayor repercusión en los años 50.

Siguiendo corrientes como el Art Nouveau o el Jugendstil, y a modo de confrontamiento con estas mismas, la Compañía de Artes Decorativas (Selskabet para Dekorativ Kunst) de Dinamarca lanzó su revista Skønvirke en 1914. 

Luego, en la década de 1930, diseñadores como Alvar Aalto (arquitectura, muebles, textiles), Arne Jacobsen (sillas), Borge Mogensen (muebles), Hans J. Wegner (sillas),

 

Aprovechamiento de la luz 

En tales lugares, el sol suele escasear y por tanto en este estilo se intenta aprovechar todo lo posible la luz, mediante el uso de colores claros y los espacios poco recargados. Se busca por tanto llevar luz al interior de los hogares en medio de un entorno con poco sol. No hay entonces una gran cantidad de muebles u objetos decorativos, así como tampoco los que hay son de colores oscuros. Se trata pues de que los colores de la habitación reflejen todo lo posible la luz, en lugar de absorberla. Del mismo modo, se buscan espacios diáfanos y crear así una sensación visual lo más luminosa posible

Con un gran ventanal se aprovecha la luz y con las cortinas se consigue privacidad

Influencia de la naturaleza y el folclore en la decoración

En el estilo nórdico-escandinavo se refleja una fuerte influencia de la naturaleza, a través de los materiales usados, dando así mucha importancia a la madera y a los tejidos. Los diseños, sobre todo de los objetos decorativos, hacen referencia a la naturaleza y están inspirados por el folclore escandinavo. Las representaciones vegetales y los motivos florales son muy comunes aquí. Todo esto hace que este tipo de decoración sea muy acogedora, pues evoca tiempos pasados y una idea de hogar más tradicional. De este modo, los muebles y objetos vintage son aquí muy apreciados. En tiempos actuales, donde todo tiende a la industrialización y a la tecnificación, son muchas las personas que necesitan mantener cierta conexión con el pasado y con corrientes más humanistas, lo que hace que este estilo goce así de gran popularidad.

Formas y colores

Las formas simples son predominantes en una habitación de estilo escandinavo, pues lo que se busca es la sencillez, en favor de un efecto sereno. Además, la combinación de este tipo de formas simples combina muy bien con los objetos y motivos folclóricos, así como con aquellos de aspecto más orgánico.

 

En lo que respecta al color, las habitaciones decoradas en este estilo usan gamas cromáticas claras y con referencias a la naturaleza. Así los colores neutros y los tonos pálidos son muy usados. Tonos blancos, beige y grises son los más comunes. Principalmente lo que se busca, como ya se ha dicho, son colores que reflejen la luz y con los que aprovechar al máximo la poca luz que proviene del exterior. También se suele usar una paleta limitada, por lo que techo, suelo, paredes y mobiliario suelen tener colores similares, quedando así el ambiente bastante uniforme.

 

Además de los colores artificiales, en la decoración nórdica-escandinava están los propios colores de los materiales naturales, siendo el de la madera el más característico. Colores que combinan muy bien con otros como los comúnmente usados en las paredes o los diferentes tejidos.

Combinación de madera y plantas
Combinación de madera y textiles

La colección Schuette® más adecuada en la decoración nórdica-escandinava

Colección de estores plisados Dolomite

 

Según todas las características ya mencionadas, una muy buena opción de la tienda Schuette® es la colección de estores Dolomite, pues la gama de colores que ofrece, así como la textura de su tejido, la hacen muy adecuada.

 

Al tratarse de un estor, su aspecto es muy minimalista y también ocupa muy poco espacio en la habitación, pues el estor se instala sobre la misma ventana y no se extiende más allá, lo que contribuye al efecto que se busca en este estilo, donde el lugar ha de ser lo más espacioso posible.

 

Los tejidos de la colección Dolomite están confeccionados con hilos de distintos colores, lo que compone una tela cuya textura tiene un aspecto más artesanal. Esto también va a favor de la estética buscada en este caso, la cual da gran importancia a los objetos cuyo aspecto remite a una elaboración tradicional.

 

Los colores de esta colección son muy neutros y los tonos generalmente claros. De este modo, son colores que reflejan bastante la luz, lo cual es aquí primordial. Además, hay varios tonos tierra, que remiten a esos materiales naturales característicos de este estilo. 

 

Cold Morning (Gris), Storm Gray (Gris), Vanilla Sky (Beige), Wet Stand (Beige), Light Coffee (Beige) y Thunder Sky (Gris).